Guayaquil es la ciudad más grande de Ecuador con algunos sitios turísticos que debes conocer. Si vas a viajar a las Islas Galápagos harás una parada en Guayaquil, así que aprovecha. Hay mucho que hacer en Guayaquil: pasear por su moderno Malecón o disfrutar del pintoresco Cerro Santa Ana. Guayaquil tiene la fama de peligrosa. ¡Y lo es! Pero también tiene muchos atractivos. Te contamos las 25 mejores cosas que ver y que hacer en Guayaquil para que disfrutes.
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El Malecón 2000 es un ícono de la ciudad, de hecho, es el atractivo principal. Se trata de un paseo fluvial de 2,5 kilómetros rodeado de jardines, monumentos, centros comerciales y restaurantes.
Si te preguntas por qué se llama Malecón 2000 te contamos que se debe a la gran reforma que se hizo en ese año. Este hecho fue uno de los proyectos de revitalización más exitosos del continente. Convirtieron un simple paseo fluvial en un sitio próspero donde se pueden realizar un montón de actividades. De hecho, algunos de los mejores atractivos que ver en Guayaquil se encuentran ahí mismo o cerca. ¡Ahora entiendes porque es el sitio más visitado de la ciudad!
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Guayaquil guarda mucha historia y es importante conocerla. El Hemiciclo de la Rotonda es el monumento a la Independencia de Guayaquil. El sitio conmemora la “Entrevista de Guayaquil“, cuando los libertadores Simón Bolívar (en representación de la Gran Colombia) y José de San Martín (por el Perú) tuvieron un encuentro el 26 de julio de 1822. El objetivo era decidir el futuro de la Provincia Libre de Guayaquil y de la independencia sudamericana. ¡Un hecho histórico!
Tenemos que admitir que Ecuador tiene sitios más interesantes que este monumento. ¡Teniendo en cuenta lo rico que es el país! Sin embargo, una vez en Guayaquil debes empaparte de su historia. Y para ello, es imprescindible conocer el Hemiciclo de la Rotonda, un sitio curioso que ver en Guayaquil.
También conocida como Torre Morisca, este edificio es uno de los más emblemáticos de Guayaquil. Está en el famoso Malecón 2000 y te recomendamos visitarla en la noche. ¡Es mucho más especial cuando está iluminada! Como curiosidad, lo más antiguo de la torre es la esfera del reloj, que se compró a Inglaterra en 1842. La estructura del edificio ha cambiado varias veces, pero la esfera sigue siendo la misma.
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Esta es nada más y nada menos que la noria más grande de Sudamérica con 57 metros de altura. ¡No te la puedes perder! Además, fue la primera de Ecuador y desde arriba tendrás unas vistas privilegiadas de la ciudad, especialmente del Malecón 2000. La entrada cuesta 3,50$ de lunes a viernes y 5$ los fines de semana. ¡Es un precio bastante económico!
Guayaquil es una ciudad súper moderna y sus edificios hablan por sí solos. Como el más alto del país, The Point, que tiene nada más y nada menos que 136,6 metros de altura. El edificio se encuentra en uno de los extremos del Malecón 2000 y tiene un diseño súper curioso. Forma parte de un complejo de oficinas, departamentos y comercio. ¡Las vistas son maravillosas! Conocerlo es algo curioso que hacer en Guayaquil.
El Cerro Santa Ana es un punto súper famoso de Guayaquil. ¡Prepárate para subir 444 escalones! Aunque suene algo cansado, pasarás entretenido con el pintoresco Barrio de Las Peñas, el más bonito de Guayaquil. Este es un barrio histórico con más de 400 años de antigüedad. ¡Impresionante y hermoso!
A pesar del paso del tiempo, el Cerro Santa Ana ha conservado sus encantos: calles pintorescas, casitas de colores y unas vistas hermosas de la ciudad. ¡Es súper colorido! Sin duda, uno de los sitios más bonitos que ver en Guayaquil.
Cuando llegues a la cima del Cerro Santa Ana debes visitar este faro. La vista panorámica desde allí es fenomenal. ¡Te dejará sin palabras! Además, seguro necesitarás descansar después de subir tantos escalones y este es un buen punto donde hacerlo.
La ciudad portuaria de Guayaquil fue establecida en 1538, de hecho, es una de las más antiguas del Ecuador. ¡Y todavía se pueden ver rastros de su pasado! En la cima de la colina podrás ver varios cañones que se usaron para proteger a Guayaquil de los piratas.
Por otro lado, el faro es relativamente nuevo. Fue construido en 2002 para reemplazar el anterior que estaba en pie desde el siglo XIX.
Guayaquil tiene rincones súper fotogénicos como este. La calle Numa Pompilio Llona es un sitio perfecto para disfrutar de la arquitectura colonial de madera. ¡Sentirás que das un viaje en el tiempo mientras paseas por allí! También te aconsejamos entrar a alguno de sus locales y disfrutar de sus piezas de arte.
Navegar por el río Guayas es otra buena idea que hacer en Guayaquil. Y para eso, te recomendamos subir al barco pirata Henry Morgan. No te quedes solo con la perspectiva desde el malecón. Durante el paseo podrás observar algunos de los monumentos más famosos de la ciudad.
Como curiosidad, esta embarcación lleva el nombre del famoso pirata galés del siglo XVII. La buena noticia es que por un paseo de 1 hora tendrás que pagar unos 7$. ¡Un precio bastante económico!
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Un plan muy divertido y diferente que hacer en Guayaquil es recorrer la preciosa Isla Santay en bicicleta. Así podrás desconectar del caos de la ciudad en medio de la naturaleza y de paso hacer un poco de actividad física.
La isla se encuentra al otro lado del río y por suerte está cerrada al tráfico de vehículos. Para llegar debes atravesar un puente peatonal de 850 metros de largo que cruza el río Guayas. ¡Es un paraíso! Hay senderos habilitados que atraviesan un manglar y un bosque tropical.
Si te gusta admirar la naturaleza y, en especial, las aves este sitio te encantará porque en Isla Santay residen más de 100 especies diferentes. Sin duda, una de las mejores cosas que hacer en Guayaquil.
Hasta la fecha no hemos probado un plato que le iguale a este manjar. El cangrejo criollo es una estrella de la gastronomía ecuatoriana. ¡Y eso que siendo español no podía estar mejor acostumbrado! Probar el cangrejo es una de las cosas imprescindibles que hacer en Guayaquil. Pero tienes que ir a sitios donde preparen una muy buena receta. Red Crab y La Pata Gorda son dos de los más famosos. ¡Súper recomendados!
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En el Parque Histórico de Guayaquil también podrás desconectar del bullicio de la ciudad. Está un poco alejado del centro, pero merece la pena llegar hasta allí porque tiene diversos atractivos:
Ahí podrás ver más de 50 especies diferentes de aves y mamíferos típicos de la región costa. ¡Interesante para los amantes de los animales! O incluso si viajas con niños es una experiencia entretenida.
A principios de 1900 se produjo un auge del cacao lo que permitió la prosperidad de los antiguos lugareños. Gracias a ello, construyeron en la zona varias casas tradicionales muy bonitas. Hoy son consideradas patrimonio cultural, han sido restauradas y ofrecen talleres o exposiciones durante todo el día.
Esta zona está dedicada al cacao, las frutas y las especias. Allí podrás aprender sobre el proceso de fabricación de chocolates a partir del cacao, visitar un huerto etnobotánico, entre otras cosas. ¡Es muy interesante!
Creemos que ninguna visita a cualquier ciudad estaría completa sin una parada en sus museos. En el Malecón 2000 se encuentra uno de los más visitados de la ciudad. Se trata de un espacio curioso, con varios pasillos repletos de piezas de arte moderno muy interesantes. ¡Hay algunas muy originales! La buena noticia es que la entrada es gratuita.
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Si bien, no es tan famoso como el Cerro Santa Ana, el Cerro del Carmen también forma parte de los atractivos turísticos de Guayaquil. Es una colina con vistas preciosas de la ciudad. Para llegar hasta arriba tendrás que subir 200 escaleras. ¡La mitad que el de Santa Ana, es un alivio! Además, en la cima podrás admirar el Monumento al Sagrado Corazón de Jesús.
También conocido como Iguana Park, esta es una parada súper divertida que hacer en Guayaquil. Sería un delito irse de la ciudad sin conocer el Parque Bolívar. ¡Está lleno de iguanas, hay unas 350! Pero dejando de lado a estos curiosos reptiles, el lugar también tiene una gran importancia histórica. El Parque Seminario fue en su día la Plaza de Armas de la ciudad colonial.
Aunque para nuestro gusto, las iglesias de Quito son mucho más bonitas, esta catedral también tiene su encanto. Es uno de los edificios más bonitos que ver en Guayaquil. Se encuentra justo en uno de los extremos del Parque Seminario. Así que puedes aprovechar tu paso por la zona.
Desde principios de la colonización de Ecuador, siempre ha existido un edificio religioso en este sitio. De hecho, la primera iglesia fue construida en 1547 con madera. Sin embargo, la versión actual data de principios del siglo XX y tiene un estilo neoclásico. ¡Es hermosa!
Y hablando de edificaciones, la arquitectura renacentista del Palacio Municipal de Guayaquil te fascinará tanto como a mí. ¡Es una auténtica joya! Más allá de su estética, también tiene una gran importancia, ya que es la sede de la Municipalidad de la ciudad.
Otra iglesia que debes añadir a la lista es la de San Francisco. Es una de las más bonitas y coloridas de Guayaquil. Se construyó en 1702 por parte de la Orden Franciscana establecida en la ciudad. Sin embargo, durante algunos incendios que sufrió la ciudad tuvieron que remodelarla varias veces. La primera fue de madera y la actual data de 1956. Como curiosidad, es el tercer templo religioso más antiguo de Guayaquil.
Si te gusta mantenerte activo incluso durante tus viajes, te recomendamos ir al Parque Samanes. Tiene una extensión de 851 hectáreas, es el tercer parque más grande de Latinoamérica. Solo está detrás del Parque de Chapultepec en México y el Parque Metropolitano Simón Bolívar en Bogotá. ¡Es espectacular!
No importa el deporte que practiques, seguro encuentras espacio donde practicarlo porque cuenta con nada más y nada menos que 57 pistas deportivas de varias disciplinas. También hay varios senderos, ciclovías e incluso un estadio de futbol. Sin duda, otro buen sitio para desconectar de Guayaquil y para hacer un poco de deporte.
En el Mercado Caraguay podrás deleitarte con los famosos bolones de verde, otra de las especialidades gastronómicas locales. Están hechos de plátano verde y suelen ser rellenos de queso, chicharrón o ambos. No importa la hora del día para comerlo, aunque lo típico es en el desayuno. ¡Te dará mucha energía y fuerza para el día!
Pero eso no es todo lo que podrás probar, también hay otros platos, especialmente de mariscos. ¡Para deleitar el paladar! Mientras decides qué comer, conocerás a los locales, sus costumbres, formas de hablar y convivir.
El Malecón 2000 no es el único que hay en Guayaquil. El Salado es el otro malecón de la ciudad, aunque son completamente diferentes. Los contrastes de los estratos son muy evidentes. Allí se encuentran los barrios de clase trabajadora. La arquitectura y la modernidad no se comparan con las del Malecón 2000. Puedes ir a dar una vuelta, por su ubicación los atardeceres son muy bonitos desde allí.
Con chorros que alcanzan los 40 metros de altura, la Fuente Monumental de Aguas Danzantes es otra atracción que no te puedes perder en Guayaquil. ¡Es muy entretenido! Si bien las fuentes están encendidas durante el día, lo más especial es visitarlas cuando cae la noche en Guayaquil. Las fuentes se iluminan y bailan al ritmo de la música. ¡No tienen nada que envidiarles a las fuentes del Hotel Bellagio en Las Vegas!
Si quieres hacer una excursión en Guayaquil, te recomendamos ir al Bosque Protector Cerro Blanco. Se trata de una reserva privada creada con el objetivo de proteger un hábitat único, el bosque seco tropical de la costa ecuatoriana. ¡La buena noticia es que está a sólo 30 minutos del centro de Guayaquil!
Durante tu visita puedes recorrer uno de los senderos donde habitan monos aulladores, una especie nativa en peligro de extinción. ¡Y eso no es todo! La reserva también alberga otras 53 especies de animales, incluidos jaguares y más de 200 especies de aves, nueve de las cuales están en peligro de extinción.
¡Es una experiencia magnífica que no te puedes perder! Visitar sitios como este te hacen reflexionar sobre la biodiversidad de nuestro planeta y que cada vez afronta más peligros.
El museo cuenta con una importante colección de arqueología conformada por casi 8.000 objetos de cerámica, hueso y piedra de la costa pacífica ecuatoriana. Estos objetos pertenecían a Presley Norton.
Sin duda, una gran oportunidad para aprender acerca del modus vivendi y las relaciones con la naturaleza de los antiguos pobladores de la zona. Si te interesa la historia, visitar este museo es un infaltable que hacer en Guayaquil.
Llegamos al final de nuestra lista de las mejores cosas que hacer en Guayaquil. Pero no podíamos terminarla sin esta excelente recomendación: la Reserva Ecológica Manglares Churute. Este espacio protege más de 35.000 hectáreas de bosques de manglares en peligro de extinción. ¡Es asombroso!
Y si te gusta admirar la naturaleza y sobre todo los animales, ¡allí podrás ver más de 45 especies diferentes mamíferos y más de 300 de aves! Seguro regresas súper renovado en medio de tanta naturaleza pura.
Te aconsejamos explorar la zona en kayak a través de sus canales. Es una experiencia única y te ayudará a observar mejor las aves. Puede ser un buen aperitivo antes de visitar las Galápagos, una visita obligada. ¡Y todo esto a menos de una hora del centro de Guayaquil!
En este mapa encontrarás marcadas las mejores cosas que ver en Guayaquil. Si tienes alguna otra duda, escríbenos un comentario.
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