Visitar Nueva Zelanda en coche es la forma más cómoda para explorar el país. Es un destino precioso, pero tendrás que pasarte muchísimas horas en la carretera. Durante nuestro recorrido de un mes por Nueva Zelanda nos hicimos casi 6.000 kilómetros. ¡Quedamos exhaustos! Si estás planificando alquilar un coche tienes que estar preparado. Así que hemos decidido redactar este post para ayudarte. Te contamos nuestra experiencia y consejos muy útiles para visitar Nueva Zelanda en coche.
Además, te dejamos un post con todo lo que debes saber para conducir en Nueva Zelanda: principales límites de velocidad, prioridad en los cruces, peligros al volante, entre otros.
¿Cuesta conducir en Nueva Zelanda
Teníamos muchas dudas entre el coche y la autocaravana. Pero para nosotros la decisión final fue acertada. ¡Incluso nos llegamos a plantear el autobús! No hay una opción mejor que la otra, todo depende de la experiencia que busques y tu presupuesto. Nosotros teníamos claro que no queríamos gastar muchísimo dinero en transporte. Buscamos algo sencillito, que nos llevara a los sitios y poder descansar de forma cómoda.
Descartamos la autocaravana porque pensamos que un mes entero sin tener experiencia con una autocaravana sería demasiado. ¡Recorrer un país de esta forma debe ser espectacular! Si hubiese sido una semanita, sin duda nos decidíamos por la autocaravana, pero al final optamos por el coche en base a varias razones.
Si pretendes visitar Nueva Zelanda en autocaravana te aconsejamos que leas este post con información que te puede ser muy útil.
Viajar por Nueva Zelanda en autocaravana
Las carreteras en Nueva Zelanda tienen sus particularidades. Además, hay que sumarle que se conduce por el otro lado. En este sentido, no es lo mismo conducir un coche que una autocaravana, es muy, muy diferente. Así que para nosotros fue una prioridad la comodidad y facilidad a la hora de recorrer Nueva Zelanda en coche. Cosa que al ser principiantes en la autocaravana no la tendríamos de primera.
Antes de aventurarte por Nueva Zelanda en coche te tiene que quedar clara una cosa: vas a hacer muchos kilómetros. Nosotros sabíamos desde un inicio que iba a ser cansado, pero no nos imaginábamos que sería tanto. Además, vas a tener que conducir en todas las condiciones: lluvia, carreteras sin asfaltar… tienes que estar muy atento al conducir por este país. Así que también pensamos que estaríamos mejor durmiendo en hoteles que en una autocaravana. ¡Y cada noche agradecíamos por la cama tan cómoda del hotel!
Las autocaravanas representan un mayor gasto. Eso es algo que debes considerar antes de alquilar una. A parte de que el vehículo en si te va a salir más caro que un coche, también tienes que sumarle los gastos añadidos. Es decir, vas a tener que pagar más por la gasolina (ya que el consumo es más alto), si vas a cruzar de una isla a otra el ferry también te costará más (ya que es más pesado), entre otras cosas.
Es cierto que alquilar una autocaravana tiene la gran ventaja de que te ahorras el alojamiento. Aunque tampoco creas que puedes dormir donde sea que te plazca. Si alquilas una autocaravana que no es self contained, vas a tener que pagar por dormir en un camping.
Nuestra ruta por Nueva Zelanda en 30 días
En Nueva Zelanda vas a encontrar una gran cantidad de empresas de alquiler de vehículos. ¡Por suerte! Es un país pensado para recorrerlo en coche, así que hay una gran oferta. Nosotros, vayamos donde vayamos, siempre lo sacamos por Rentalcars.
En este caso, nos decidimos por la compañía que nos salía más económica: Ezi Car Rental.
Asegúrate de coger el seguro a todo riesgo. Nunca sabes lo que te puede pasar, no vas a conducir solo y somos muchos los turistas sueltos por Nueva Zelanda. Vale la pena pagar un poco más por tener el seguro a todo riesgo e ir más tranquilo. Si tienes el coche aparcado en la calle y te dan un golpe, no te hará ninguna gracia tener que la pagar la reparación.
Si coges el coche en Rentalcars, también te aconsejamos coger el seguro de esta misma empresa ya que es más barato. Pero debes estar atento que no te lo intenten colar los de la compañía de alquiler al recoger tu vehículo.
Reserva tu coche al mejor precio
En general, visitar Nueva Zelanda en coche está chupado si llevas el coche adecuado. ¡Aunque nosotros no podemos presumir de ello!
Un error que cometimos fue coger el coche más económico, un Toyota Yaris. Y eso nos privó de visitar algunos Parques Nacionales porque no podíamos ir por carreteras sin asfaltar con ese coche. Además, le faltaba un punto de potencia para adelantar a los camiones en las carreteras, así que batallamos un poco. Un consejo muy útil para visitar Nueva Zelanda en coche es que no escatimes. Te vas a pasar muchas horas en la carretera y la comodidad no tiene precio.
65 lugares mágicos que ver en Nueva Zelanda
Hay bastantes compañías de alquiler de coches que ofrecen vehículos antiguos con más de 200.000 kilómetros. Nosotros no te lo aconsejamos. A parte de que el consumo siempre va a ser más alto, no se pueden comparar con los nuevos. Por otro lado, debes pensar que con tantos kilómetros los coches puedes ser menos fiables.
Nosotros pensamos que al final lo barato sale caro. Repetimos. Vas a pasarte muchas horas en el coche y es muy importante ir cómodo. Al menos asegúrate de alquilar un coche del mismo año o del anterior que tenga conexión USB para cargar el teléfono o para sincronizar tu propia música. Esto te dará la tranquilidad de que el coche sea más seguro.
Después de nuestra experiencia creemos que alquilar un SUV es la mejor opción a la hora de visitar Nueva Zelanda en coche. Tampoco hace falta coger el coche más caro, pero tampoco te vayas por el más barato. Creemos que un tipo Nissan Qashqai es ideal para recorrer el país.
En general, la mayoría de los coches en Nueva Zelanda son automáticos. Aun así, se ven algunos manuales. En este caso, un coche automático es mucho más cómodo que un manual. Con tantas horas al volante por enfrentar, es una comodidad que se agradece.
Nosotros lo alquilamos de gasolina, aunque el diésel es mucho más económico. Normalmente por cada litro te ahorras unos 70 céntimos, y eso al final del viaje supone una cantidad importante.
Eso sí, ten en cuenta que los vehículos diésel tienen que pagar un impuesto. Esto se le conoce como road user charges, que cuestan 76NZD por cada 1000 kilómetros. Evidentemente, cuantos menos kilómetros vayas a hacer más te interesará un coche diésel. Pero lo poco que te ahorres, lo pagas al medio ambiente. El valor se suele pagar a la empresa de alquiler cuando devuelves el coche y comprueban los kilómetros que has hecho.
Como hemos dicho, en general son bastante buenas (y preciosas), pero es importante que tengas presente estos factores:
Este es uno de los aspectos más importantes. Por eso hay que llevar un buen coche. En la mayoría de las carreteras te vas a encontrar algún tramo sin asfaltar o en obras. Así que si tienes un coche bajito, vas a sufrir y será mejor que cruces los dedos para que no te salte alguna piedra al cristal. ¡Un SUV es lo mejor!
Normalmente son carreteras cómodas y con poco tráfico. Eso a veces provoca que sean monótonas, aburridas y cansadas. Si llevas bastante tiempo conduciendo, te aconsejamos que vayas parando para retomar energía, así evitar sustos y conducir descansado. Una de las cosas positivas de sus carreteras es que constantemente hay varios espacios habilitados para parar y retomar energía.
Sí, excepto en las grandes ciudades, donde seguramente te toque pagar por un parking privado. Además, en ocasiones no hay espacios disponibles y pierdes tiempo buscando uno. Así que visitar Nueva Zelanda en coche es práctico, en parte, porque aparcar es sencillo casi en todas partes. La mayoría de los parkings son en batería, así que no tiene ninguna complicación.
La entrada Nueva Zelanda en coche: nuestra experiencia y consejos se publicó primero en Los Traveleros.